martes, 4 de enero de 2011

Despertar en otro lugar.

Vi dos nubes infinitas pasear por un semblante mar azul,
cielo si es tu preferencia.
Estaban inundadas, plagadas, contaminadas
(sí, como yo en su momento).
Hoy cierro los ojos y te veo,
por momentos gris, por otros blancos y escasas veces multicolor.
¿Sabías que de vez en cuando pienso en vos?
Yo creo que tampoco.
Las tormentas desaparecen cuando creo en algo más,
(cuando espero algo más).
Las nubes ya no son dos, son miles,
la tormenta se acerca.
La esperaré mientras me pierdo en un laberinto de fotografías que no me pertenecen.
Mañana será sólo un día más,
no queda tanto tiempo.

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